La gente de siempre, la gente a la que extraño tanto cuando estoy en mi casa, el aire ese que me hace sentir tan libre, el paisaje que intento guardarme como foto mental para esos días en que la ciudad me ahoga, los olores que tanto me gustan. Lo de siempre se podría decir, aunque no me gusta mucho esa frase, me hace pensar que lo de siempre es algo malo, algo cansador, todo lo contrario a lo que me produce en realidad.
En el aire había otras sensaciones, la visita de mi hermano después de 3 años generaba un aire distinto complicado de explicar.
Como siempre, estában ellas, mis primas, esas que me alegran todos los días de campo, esas que me mantienen todo el tiempo en movimiento, subiendo a la casa de una, bajando a la casa de otra, caminando un par de kilómetros para visitar a la que queda... en fin, las primas de Córdoba.
En esos días hicimos lo que hacemos siempre: comimos carne a la parrilla a morir, fuimos al río, miramos películas mientras comemos pochoclo (pururú para los cordobeses), chisitos y chupetines. Tomamos mates hasta quedar verdes, con yuyos que le dan sabor rico (yerba buena y burro), hicimos fiaca a la hora de la siesta tiradas en algún sillón o en alguna cama, hablamos hasta por los codos, hicimos lo que más me gusta hacer cuando estoy con ellas: aprovecharlas porque después no las veo durante un largo tiempo y las extraño a morir.
lunes, marzo 24
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
el pasado
Datos personales
- Floretta
- i'm a real nowhere woman, sitting in my nowhere land, making all my nowhere plans for nobody.. am i not a bit like you?
No hay comentarios:
Publicar un comentario