Volver a viajar de noche, después de tantos años de acostumbrarme al viaje de día. Poder volver a ver esas postales mentales que ya se me estaban olvidando. Ver las luces de los pueblos, ver cómo la luna es lo único que ilumina la ruta, ver esos paisajes que yo veía de día con otro enfoque.
Intenté dormir y no pude, cosa que al resto no le costó nada. Así que me dediqué a mirar y mirar todos los paisajes que mis ojos podían captar.
Llegamos a la ciudad con el sol y me fui a dormir porque esos tres días llenos de actividades y casi sin horas de sueño habían hecho efecto en mi.
lunes, marzo 24
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el pasado
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- Floretta
- i'm a real nowhere woman, sitting in my nowhere land, making all my nowhere plans for nobody.. am i not a bit like you?
1 comentario:
el encanto y el espanto de viajar en semana santa.
el viaje con sus lios en las rutas, el cansacio de tantas horas sentada en el asiento del micro en mi caso.
el lugar de una provincia con su paz, su gente, su naturaleza... que te hace pensar en la loca cuidad que parece otro mundo.
tener tiempo para pensar, dormir, comer, ser feliz
jaja
pero es lindo poder regalarse esos dias...
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