"Dificultad para conciliar el sueño al acostarse" (según la wikipedia).
Los ojos están abiertos, bien abiertos y no podés hacer nada para cerrarlos, no hay música que te ayude, no hay película que te dormite, no hay almohada que logre hacerte cerrar los ojos, no hay cama suficientemente cómoda, no hay nada que haga llegar el sueño hacia vos.
Te acostás porque no queda otra opción, porque tenés conciencia de que al día siguiente te tenés que levantar y hacer tu vida normal. Te acostás y cerrás con fuerza los ojos pero nada, ellos quieren permanecer bien abiertos contemplando la oscuridad del cuarto.
Estás acostada en tu cama moviéndote sin cesar porque no podés quedarte quieta, es imposible encontrar la comodidad, parece que se perdió en algún rincón del cuarto.
Tu mente está funcionando a toda velocidad, ese tema que tanto tiempo de tu vida está ocupando no quiere dejarte dormir, se piensa y se re-piensa toda posibilidad de solución y no hay ninguna que te satisfaga. Tu mente evalúa todas las opciones (hasta las más extremas) y reproduce cada una de ellas en tu imaginación. Ninguna te termina por cerrar, lo que te sigue dejando cada vez más despierta.
Los ruidos de la calle y de tu casa se hacen notorios: el ruido de la computadora, el de los autos y colectivos que arrancan con el semáforo en verde, algún que otro ronquido, el ruido de alguna alarma que suena y suena esperando que la reconozcan y la desactiven. Se hacen notorios y a veces se hacen insoportables y terminamos por culparlos por nuestra falta de sueño.
El reloj sigue corriendo y cada segundo se hace más interminable que el anterior Si tenemos la posibilidad de ver la hora la chequeamos cada minuto y pensamos en lo eterno que puede llegar a ser el tiempo. Si no hay relojes a la vista calculamos mentalmente la hora guiándonos por sonidos o por la cantidad de luz que se cuela por la persiana pensando en cuán exactos podemos llegar a ser o cuán equivocados podemos llegar a estar.
Los ojos están abiertos, bien abiertos y no podés hacer nada para cerrarlos, no hay música que te ayude, no hay película que te dormite, no hay almohada que logre hacerte cerrar los ojos, no hay cama suficientemente cómoda, no hay nada que haga llegar el sueño hacia vos.
Te acostás porque no queda otra opción, porque tenés conciencia de que al día siguiente te tenés que levantar y hacer tu vida normal. Te acostás y cerrás con fuerza los ojos pero nada, ellos quieren permanecer bien abiertos contemplando la oscuridad del cuarto.
Estás acostada en tu cama moviéndote sin cesar porque no podés quedarte quieta, es imposible encontrar la comodidad, parece que se perdió en algún rincón del cuarto.
Tu mente está funcionando a toda velocidad, ese tema que tanto tiempo de tu vida está ocupando no quiere dejarte dormir, se piensa y se re-piensa toda posibilidad de solución y no hay ninguna que te satisfaga. Tu mente evalúa todas las opciones (hasta las más extremas) y reproduce cada una de ellas en tu imaginación. Ninguna te termina por cerrar, lo que te sigue dejando cada vez más despierta.
Los ruidos de la calle y de tu casa se hacen notorios: el ruido de la computadora, el de los autos y colectivos que arrancan con el semáforo en verde, algún que otro ronquido, el ruido de alguna alarma que suena y suena esperando que la reconozcan y la desactiven. Se hacen notorios y a veces se hacen insoportables y terminamos por culparlos por nuestra falta de sueño.
El reloj sigue corriendo y cada segundo se hace más interminable que el anterior Si tenemos la posibilidad de ver la hora la chequeamos cada minuto y pensamos en lo eterno que puede llegar a ser el tiempo. Si no hay relojes a la vista calculamos mentalmente la hora guiándonos por sonidos o por la cantidad de luz que se cuela por la persiana pensando en cuán exactos podemos llegar a ser o cuán equivocados podemos llegar a estar.
1 comentario:
flore... ummmm todos andamos con insomnio en estas noches de nariz fria parece...
fui a san telmo, y estuvo lindo, pero quiero ir de vuelta, porque fuimos tarde y no habia buena luz, y tampoco nos animamos a recorrer el barrio bien bien con las camaras de fotos a la noche =( asi que si sigue en pie tu propuesta de acompañarme, quien sabe esta semana nos conocemos!!!
aiii quiero charlar con vos, porque me gusta charlar con vos, porque quiero charlar con alguien ahora, porque todavia no hay sueño, porque yo tambien tengo insomnio, o razones que no me dejan dormir.
hoy esta para escuchar sebastian kramer, un lindo descubrimiento que me diste =)
Publicar un comentario