domingo

Hay domingos y domingos. Hay domingos en los que no quiero despegarme de la cama o del sillón y mirar televisón hasta la noche o no despegarme de la silla de la pc y quedarme haciendo nada en mi computadora.
Pero hay domingos que no. Hay domingos en los que uno se despierta de muy buen humor y tiene ganas de hacer algo, de salir, de moverse.
En realidad mi actividad de este domingo ya estaba planeada desde el viernes. Pero hay veces que uno no quiere cumplir con los planes armados con anticipación y cancela todo. Este no fue el caso: me levanté de un humor excelente y después de comer y de estudiar un poquito me fui con mis viejos al cine, cosa que no hago muy seguido. Fuimos al cine y vimos "El nido vacío" de Burman.
Y qué puede decir uno que vio una película de Burman? Que es demasiado genial. La historia, los actores, la imágen, los silencios, las palabras, los lugares...
Y que la película termine y de repente se escuche a la persona indicada cantando la canción indicada: Drexler... Drexler y su voz tan particular y hermosa y sus palabras tan pero tan lindas.

Me hiciste señales que debí entender, como aquel gesto nuevo de arreglarte el pelo/Miraste como quien mira llorar un instante antes de levantar vuelo/Volviste a tu cauce de estrella fugaz, Con tu punto de fuga en el cielo/Creo que ya estabas flotando quizás un instante antes de levantar vuelo/Ya te mojabas en otro deshielo un instante antes de levantar vuelo/Ni todas las líneas del Ecuador ni el temor y sus muchos anzuelos/Todo argumento perdía valor un instante antes de levantar vuelo/El río cambia y cambia la sed, lo habías leído en tu anhelo/Estaba ya escrito mucho antes de el instante antes de levantar vuelo/Ya me mirabas desde otro cielo un instante antes de levantar vuelo/